Un buen factor de potencia permite optimizar la instalación eléctrica y proporcionar las siguientes ventajas

• Sin facturación por energía reactiva.

• disminución de la potencia suscrita en kva

• limitación de las pérdidas de energía activa en los cables dada la disminución de la corriente transportada en la instalación

• mejora en el nivel de voltaje al final de la línea

• potencia adicional disponible en los transformadores de potencia si la compensación se realiza en el devanado secundario